miércoles, 26 de septiembre de 2007

Los Errázuriz

Abstract

The Errázuriz are a noble, ancient Chilean family that came from Spain. Pedro Errázuriz worked for the king of Castilla, Alfonso XI and the first Errázuriz who came to Chile was Francisco Javier Errázuriz.

The Errázuriz family, since their arrival to Chile, has taken part very narrowly in the politics and Chilean history; also in our country’s religious area.

Since they came, they have kept their Surname with pride and respect, through each generation.

Sus comienzos

Uno de los antecedentes que confirman la antigüedad y nobleza de este apellido, es el hecho de que uno de sus más antiguos miembros fue una especie de guardia del rey Alfonso XI. “Pedro de Errázuriz había sido ayo de Alfonso XI de Castilla. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española sostiene que el ayo (palabra que proviene del gótico hagja, un guardia), era una "persona encargada en las casas principales de custodiar niños o jóvenes y de cuidar de su crianza y educación". Por lo tanto, debemos suponer al ricohombre Errázuriz velando por la integridad del monarca durante la mocedad de éste, o, bien, de sus hijos” [1]. Esto convierte a los Errázuriz en una familia antigua, noble y de mucho dinero.

Llegada a Chile

Francisco Javier Errázuriz Larraín llegó a Chile en el año 1733 en plena colonia de nuestro país; proveniente de la villa Aranaz perteneciente al antiguo reino de Navarra.

Ya en Chile se casa con Loreto Madariaga Jáuregui-Lecerna, quien al igual que él era descendiente de navarros. Fue regidor en 1746, alcalde de Santiago de 1756 a 1781, regidor perpetuo del cabildo desde 1759, entre otros cargos públicos importantes.

De su matrimonio nace Francisco Javier de Errázuriz y Madariaga quien fue abogado de la Real Audiencia en 1770; Doctor en Derecho de la Universidad de San Felipe, entre otros. Se casó con Rosa del Rosario Martínez de Aldunate Guerrero y tuvieron trece hijos de los cuales uno, Francisco Javier Errázuriz Aldunate fue padre y abuelo de dos presidentes de Chile. Se casó dos veces.

De su primer matrimonio con Josefa Zañartu Manso de Velasco nació Federico Errázuriz Zañartu quien ocupó la presidencia de nuestro país desde 1871 hasta 1876.

Su gobierno se caracterizó por profundizar las reformas que comenzarían a debilitar el sistema presidencialista [2] de gobierno y a fortalecer los poderes del Congreso. Eliminó el fuero de la iglesia para las causas civiles y criminales e hizo que la educación chilena en los colegios pudiera ser laica y no profesara obligatoriamente de religión católica.

Otro aspecto importante de destacar es que durante su gobierno se extendió el ferrocarril desde Curicó hasta Chillán y desde allí, hasta Talcahuano y Angol. También se terminaron los edificios del Congreso Nacional y el de la Quinta Normal. En ese mismo período la familia Cousiño regaló el parque de su nombre a la ciudad de Santiago y mucho tiempo después este pasó a llamarse parque O’Higgins.

El término de su gobierno no fue en una época muy favorable para Chile puesto que el país sufría una fuerte crisis económica que se vio agravada por numerosas quiebras de empresas dedicadas al cobre y la plata, la pérdida de salitreras, entre otros.

Fuera de las labores propias de su cargo presidencial, Federico tenía fama de autoritario y desagradable. Se casó con Eulogia Echaurren García-Huidobro con la que tuvo trece hijos de los cuales uno llegaría también al poder.

Así veinte años después de terminado el gobierno de Federico Errázuriz Zañartu llega al poder un nuevo personaje llamado Federico Errázuriz Echaurren. Fue el primer presidente de Chile que estuvo a punto de gobernar de un siglo a otro, comenzó en septiembre de 1896 y terminó, prematuramente, en octubre de 1900.

Fue un opositor a Balmaceda, y en 1891 fue uno de los firmantes del acta de deposición del Presidente.

“Él era un hombre inteligente y, a diferencia de su padre, un tipo ingenioso, socarrón, mordaz, buen producto de aquella oligarquía vasca que se adueñó del campo chileno en el siglo XIX, y luego se apoderó de Santiago, la moneda incluida” [3].

Se casó con Gertrudis Echenique Mújica quien fue la primera “primera dama” de Chile. Murió durante su mandato por delicados problemas de salud.

Volvamos entonces a don Francisco Javier Errázuriz Aldunate y a su segundo matrimonio con Rosario Valdivieso Zañartu y su hijo.

Crescente Errázuriz Valdivieso nació el 28 de noviembre de 1839. Recibió el sacerdocio el 18 de diciembre de 1863. En el año 1869 asistió al Concilio Vaticano I, ya que acompañaba a su tío, el arzobispo de Santiago en ese entonces, Rafael Valentín Valdivieso Zañartu.

Fundó el Estandarte Católico en 1874, para defender sus intereses religiosos y atacar a liberales y masones quienes no compartían dichas creencias.

Fue incorporado a la Real Academia de la Lengua de Chile y ganador de una medalla de oro por su trabajo Los orígenes de la Iglesia Chilena.

El 30 de diciembre de 1918 fue elegido arzobispo de Santiago por el papa Benedicto XV.

“Inició una política para independizar a la Iglesia Católica de las acciones del Partido Conservador. En 1920 propuso la creación de los obispados de Valparaiso y Talca. Representó a la Iglesia en las conversaciones que culminaron con la separación de la Iglesia y el Estado en la Constitución de 1925[4].

Crescente Errázuriz falleció en Santiago en 1931 y fue sepultado en la Catedral Metropolitana.


Los Errázuriz en la actualidad




Uno de los descendientes de esta familia más destacado en nuestros días es el Cardenal de Santiago.

Francisco Javier Errázuriz Ossa, nace en 1933 en un hogar en que la religión era lo más importante. A sus almuerzos familiares llegaban sacerdotes y otros miembros de la iglesia, además su madre cuenta que durante su embarazo decidió, además de ir a misa, comulgar todos los días de los nueve meses.

Es ordenado sacerdote con otros 10 diáconos chilenos. Esta ordenación tuvo lugar en Friburgo, el 16 de Julio de 1961.

En el año 1962 recibió el grado de Licenciado en teología en la Universidad de Friburgo, Suiza y en 1974 fué nombrado superior general del Instiruto de los Padres de Schoenstatt en Alemania.

En 1998 el papa Juan Pablo II lo nombra arzobispo de la ciudad de Santiago y en 2001 fue creado Cardenal.

Los Errázuriz han sido una de las familias más poderosas dentro de la historia de nuestro país, ya sea en ámbitos políticos o religiosos, y no cabe duda de que lo sigan siendo por muchos años más.

Rocío Valenzuela Rodés II º C

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[1]http://www.genealog.cl/Chile/E/Errazuriz/

[2]Sistema político en que el presidente de la República es también jefe del Gobierno. (Diccionario pequeño Larousse ilustrado. Editorial Larousse 1995)

[3]Hernán Millas, La sagrada familia. Editorial Planeta.

[4] http://es.wikipedia.org/wiki/Crescente_Err%C3%A1zuriz

Bibliografía

http://tpino.netfirms.com/errazuri.htm

http://buscador.icarito.cl/icarito/index.jsp?keywordsABuscar=IkZlZGVyaWNvIEVycsOhenVyaXogWmHDsWFydHUi

http://www.genealog.cl/Chile/E/Errazuriz/

http://es.wikipedia.org/wiki/Federico_Err%C3%A1zuriz_Za%C3%B1artu

http://www.latercera.cl/medio/articulo/0,0,38035857_172985949_182390233,00.html

http://es.wikipedia.org/wiki/Crescente_Err%C3%A1zuriz

http://www.iglesia.cl/santiago/errazu.html

http://tpino.netfirms.com/nota3.htm

http://www.icarito.cl/medio/articulo/0,0,38035857_152309045_187291446_1,00.html

http://www.latercera.cl/medio/articulo/0,0,38035857_172985949_182651242,00.html

http://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_Javier_Err%C3%A1zuriz_Ossa

Hernán Millas “La Sagrada Familia”. Editorial planeta.

Imágenes

http://buscador.icarito.cl/icarito/index.jsp?keywordsABuscar=IkZlZGVyaWNvIEVycsOhenVyaXogWmHDsWFydHUi

http://images.google.cl/imgres?imgurl=http://www.educarchile.cl/ntg/personajes/1611/articles-94777_foto.jpeg&imgrefurl=http://www.educarchile.cl/ntg/personajes/1611/propertyvalue-41829.html&h=320&w=245&sz=17&hl=es&start=1&tbnid=1xXV1rkmQtn6PM:&tbnh=118&tbnw=90&prev=/images%3Fq%3Dfederico%2Berr%25C3%25A1zuriz%2Bechaurren%26gbv%3D2%26svnum%3D10%26hl%3Des%26client%3Dfirefox-a%26channel%3Ds%26rls%3Dorg.mozilla:es-AR:official%26sa%3DG

http://es.wikipedia.org/wiki/Crescente_Err%C3%A1zuriz

http://www.iglesia.cl/santiago/errazu.html

lunes, 10 de septiembre de 2007

Una nueva elite empresarial

Abstract

Between 1830 and 1880, thanks to Chilean economic growth and development, arose an elite business which will become the foundation for generating profits. Leaving behind traditional mercantilist and landowing ways of the colonial era, the process will rapidly take over the most crucial and dynamic areas of the economy.

This elite group will be responsible for Chilean economic and cultural expansion through the implementation of new technical ideas, which will be made effective by several businessmen, such as, Agustin Edwards Ossandon, Jose Tomas Urmeneta, and Matias Cousiño.

The rise of this elite business will pave the way for future great riches, country development, and will place the Chilean economy on a world wide level...

La nueva Elite

Entre 1830 y 1880, un avance económico en Chile, estimulado por la inclusión del país en la economía mundial, como exportador de materias primas mineras y agrícolas (plata, cobre, trigo y harina) e importador de las manufacturas, productos de la revolución industrial; dieron origen al surgimiento de una nueva elite empresarial, distinta de la tradicional elite mercantil y terrateniente de origen colonial.
Sin embargo, es necesario analizar y dar a entender qué es una elite; pues bien, este término es usado para referirse a pequeños grupos dentro de una sociedad, los cuales tienen un estatus superior al de los demás. De esta manera, se puede deducir que este tema hace referencia a las grandes familias de la época.

Es así, como en 1862 fue publicada en Chile la novela “Martín Rivas”, por el autor Alberto Blest Gana, la cual se enfocaba en la sociedad chilena de mediados del siglo XIX y, en especial del nuevo tipo empresarial. La obra giro en torno a la familia de Don Dámaso Encina, el cual administró algunos negocios mineros y compró un fundo de campo en Santiago, el cual hizo que él y su familia fueran reconocidos como grandes aristócratas.
A su vez, en esos años (1865), un científico extranjero, Claudio Gay, se refería también a este nuevo tipo empresarial en su obra “Agricultura Chilena”, la cual decía:
“Negociantes y mineros son los que bastante acostumbrados al trabajo y al movimiento de la plata, saben gastar sus capitales y se apresuran convenientemente para poner sus haciendas en estado de prosperidad. Tienen más experiencia que los antiguos hacendados y se apresuran a disponer de una parte los productos de su primitivo trabajo para crearse ellos nuevas riquezas. La experiencia ha demostrado que bajo la dirección de las personas ricas y especialmente de los mineros es como las haciendas de escaso valor se han convertido al cabo de algunos años en un manantial de riqueza y de grande productos”.

Sin duda alguna, ambas obras están relacionadas con la nueva elite que tomó rápidamente el control de las áreas más dinámicas de la economía, y que dará origen a la aparición de las grandes fortunas de Chile.

Como consecuencia, este nuevo grupo social llevó a cabo una expansión cultural del país a través de nuevos conocimientos y técnicas, tales como el levantamiento de un complejo minero industrial exportador; a su vez por una renovación urbana (tranvías y nuevos barrios); la creación de un sistema financiero (bancos y sociedades anónimas); el progreso de ciertas actividades agrícolas (viñas y molinos) y finalmente la aparición de una infraestructura de transporte terrestre (ferrocarriles) y marítima (vapores y puertos).

A lo lejos, se puede observar infraestructura de transporte marítima: barcos.


Aparición del ferrocarril, idea propuesta por el empresario estadounidense William Wheelwright.

Sin embargo, cabe destacar que una de las formas que nos permite analizar el impacto sobre la economía, es a través de las inversiones, las cuales fueron introducidas en el mundo de los negocios de Chile del siglo XIX. Éstas aparecieron debido a múltiples causas que afectaron a los mercaderes (personas que controlaban el comercio de importación y exportación), las que los llevaron a diversificar sus negocios invirtiendo en bienes urbanos, haciendas agrícolas, fábricas artesanales, minería y crédito.

Por otro lado, con respecto al tema de las fortunas chilenas, el 26 de Abril de 1882, fue publicada en el diario “El Mercurio”, una lista con las principales fortunas de nuestro país, cuyo autor sería Benjamín Vicuña Mackenna. Ésta señalaba que aquellas riquezas, provenientes de la minería, industria, comercio y crédito, sumaban 134.500.000 pesos, lo que representaba el 84,3%, mientras que las del mundo agrario (del campo, agricultura), sumaban unos 24.500.000 pesos, lo que era equivalente a un 15,7%.

Entre los integrantes de la nueva elite, podemos mencionar a los descendientes del banquero y habilitador minero Agustín Edwards Ossandón; por otro lado, los del forjador de la industria del carbón Matías Cousiño; del minero y fundidor de cobre José Tomás Urmeneta; como también, del comerciante y productor de azúcar José Tomás Ramos; del fundidor inglés Carlos Lambert y del industrial alemán Carlos Anwandter. Sin embargo, existió la presencia de otros empresarios, que si bien no se destacaban por su fortuna, lo hicieron por su capacidad emprendedora y creativa, como José Santos Ossa, quien fue explorador del norte y descubridor del salitre en Antofagasta.

A continuación se analizará a don José Tomás Urmeneta, el cual fue uno de los grandes empresarios, que en virtud de su esfuerzo y capacidad de trabajo, pudo construir una fortuna, demostrando siempre el espíritu creativo y emprendedor, que mas tarde permitirá el crecimiento y desarrollo del país en el siglo XIX.

Este personaje fue uno de los grandes inversionistas de la época. Todo comienza cuando el gran empresario se interesa por el cobre que se encontraba en el norte de Chile, comenzando en 1833 una aventura de minero que se prolongo sin grandes éxitos hasta 1848. De esta manera, se puede deducir que el inversionista durante 15 años invierte su dinero recaudado; así mismo, como se ve obligado a pedir prestado para lograr hacer rentable la explotación que lleva a cabo el mineral.
Es por esto, que todo el capital y energías de Urmeneta, se consumen en la construcción de un gran socavón (cueva o pique) que debía llegar al centro de la veta de cobre, para que este pudiera sacar el mineral de altísima ley. Es así, como en ese mismo año (1848), cuando ya casi no le queda dinero y viéndose afectado por grandes deudas, el pique llega al centro de la veta y la fortuna la sonríe. En dos años de explotación hace una fortuna que lo convierte en uno de los mineros más ricos de Chile hacia 1850.
Sin duda alguna, este empresario es un claro ejemplo que muestra la creatividad y el esfuerzo, que darán como consecuencia un desarrollo económico del país.

El historiador Sergio Villalobos valora el trabajo de estos empresarios en las siguientes palabras: “qué habría sido de Chile y lo que seríamos hoy si no hubiese habido en el siglo XIX un dinámico grupo de mineros del cobre y de la plata en Atacama, pioneros del ferrocarril y la navegación a vapor, industriales arriesgados y banqueros activos. Ellos fueron los que juntaron capitales, realizaron inversiones, exploraron el territorio, trajeron técnicos y maquinarias y expusieron su fortuna en negocios audaces. Sin ello habría que imaginar un país de tono rural y atrasado".

Otra valorización a los grandes empresarios se puede encontrar en los estudios del destacado economista Joseph Schumpeter, relacionados con el desarrollo y crecimiento de la economía y los países: “los empresarios tienen un rol fundamental cuando son creativos e innovadores y saben introducir cambios y modificaciones en la producción, los que a su vez provocan cambios en los sistemas productivos activando el crecimiento de la economía y la sociedad. Quienes no son capaces de ser creativos e innovadores son solo administradores - management, en la terminología estadounidense- reservando el rol de empresarios a los creativos e innovadores”, comenta el economista.

Carlos Lambert.

Carlos Anwandter.


José Santos Ossa.
Finalmente, se puede decir que el surgimiento de la nueva elite empresarial, provocó un gran desarrollo y avance de Chile, ya sea, principalmente en el ámbito económico, como también en la expansión cultural del país.

Por Sebastián Sánchez


Bibliografía:

http://www.memoriachilena.cl/mchilena01/temas/index.asp?id_ut=empresariosdelsigloxix

http://www.memoriachilenaparaciegos.cl/archivos2/pdfs/MC0000048.pdf

http://www.memoriachilena.cl/mchilena01/temas/dest.asp?id=surgimientodeunanuevaeliteempresarial

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http://www.educarchile.cl/Userfiles/P0001%5CFile%5CJOSE%20TOMAS%20URMENETA2.ppt#15

http://es.wikipedia.org/wiki/Elite

http://www.efe.cl/html/corporativo/ferrocarril.php

Bibliografía de Imágenes:

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http://www.scielo.cl/fbpe/img/historia/v35/FIGURA-2.gif

http://www.areaminera.com/medios/cultura/personajes/urmeneta.jpg

http://www.areaminera.com/medios/cultura/personajes/lambert.jpg

http://www.latercera.cl/showjpg/0,,1_183848594_120_120,00.jpg

http://www.memoriachilena.cl/archivos2/thumb200/MC0012953.jpg

domingo, 2 de septiembre de 2007

Los Edwards

Abstract

The Edwards, a millionaire chilean family, came from England in 1804. Their history in our national land is going on holding the hands with the Chile’s history, at the start, in the Independence.

George Edwards Brown, an english pirate, had ten children. Austin was the mos important. Since that date, in each generation have there been an important Austin, till this day.

Austin Edwards Ossandón began his independent life as a banker; he established the Edwards bank and bought El Mercurio de Valparaíso, a chilean newspaper.
His Grandson, Austin Edwards Mac-Clure, established El Mercurio of Santiago, a very known newspaper till today.

Edwards bank and El Mercurio are still owned by family Edwards, an honourable and virtuous family…

La familia Edwards

A finales del siglo XVIII y a inicios del XIX, Chile dejaba atrás el período de la Colonia y, debido a visiones democráticas procedentes de Europa, se despertaba en la sociedad un “afán de emancipación en Chile”[¹]: la Independencia. Es en este mismo lapso, en el año 1804, cuando un buque inglés –el Blackhouse- recala en La Serena, con una tripulación pirata.

A bordo de la nave, se encontraba el marino inglés George Edwards Brown, fundador de la familia Edwards en Chile.

Se cuenta que, durante su estancia en La Serena, George Edwards se enamora de Isabel Ossandón Iribarren y decide dejar la piratería y permanecer junto a su amada.

Escondido en la casa de Isabel, George Edwards espera la retirada de su tripulación. Al irse ellos, es capturado por los españoles y transportado hacia El Callao, quedando preso por dos años. Cuando salió de prisión en 1806, vuelve a La Serena para contraer matrimonio con Isabel Ossandón en ese mismo año. Se le nacionalizó chileno y luego comenzó a dedicarse a ciertas actividades mineras de la región.

Ocho hijos fueron concebidos en este matrimonio: Joaquín, Teresa, Juan Bautista, Santiago, Carmen, Agustín, José María y Jacoba Edwards Ossandón, todos nacidos en La Serena.

La familia Edwards fue, y sigue siendo, una de las familias más conocidas, influyentes y acaudaladas en Chile. Desde su llegada, hace ya doscientos años, han intervenido de forma considerablemente significativa en nuestra historia. En diversas ramas de la sociedad en estado presentes; tanto como en la economía, la política, la prensa, la historia y la minería. Una crónica que se va edificando con el transcurso de generaciones.

El primogénito, Joaquín Edwards Ossandón, nacido el 24 de agosto de 1808, decidió seguir los pasos de su padre e hizo importantes contribuciones a la minería que se realizaba en La Serena.
Joaquín se fue a estudiar a Boston y cuando volvió a Chile “estableció las fundiciones de Cobre; Diaguita en La Serena y Lirquén en Concepción”[2]. Joaquín Edwards fue el abuelo de Joaquín Edwards Bello (1887), llevando éste último apellido por su madre; Ana Luisa Bello Rozas, nieta de Andrés Bello. Joaquín Edwards Bello [izquierda] fue un escritor, famoso por sus críticas a Chile, a su pueblo, a sus clases sociales y a sus costumbres. Desde pequeño se había interesado por la literatura. Durante su vida como estudiante creó dos revistas y años más tarde, se desenvolvía sin miedo exponiendo artículos en los periódicos. Recibió el Premio Nacional de Literatura y el Premio Nacional de Periodismo.

Teresa Edwards Ossandón dio origen a la familia Délano en Chile, gracias a su segundo matrimonio; Paul Hinckley Délano.

El tercer descendiente; Juan Bautista Edwards Ossandón, entre sus ocho hijos se encuentra Alberto Edwards Argandoña, padre de otro escritor: Alberto Edwards Vives. Como su primo, Alberto Edwards criticaba la forma de vida de los chilenos y su “ineficiente” forma de gobierno en la época. Sus ensayos relacionados con la historiografía de Chile fueron más conocidos que cualquier otra cosa que haya escrito, siendo La Fronda Aristocrática en Chile el más sobresaliente.

Santiago y Carmen mantenían la tradición del crecido número de retoños en su linaje. Carmen Edwards Ossandón contrajo matrimonio con el escocés David Ross. Su hija mayor, Juana Ross [derecha], es reputada por su noble espíritu solidario. Su vida está salpicada de enorme actos de caridad. Uno de ellos fue el auspicio de la construcción del Hospital San Agustín de Valparaíso; y ayudó a reconstruirlo cuando padeció en el terremoto de 1906. La Casa de Maternidad en el hospital de San Felipe fue obra de ella también, tal vez manifestando de alguna forma desviada, el dolor que sintió al vivir la muerte de todos sus hijos.

José María no tuvo descendientes y Jacoba se casó con un norteamericano, con quien tuvo ocho hijos.

La celebridad y fortuna de la familia Edwards en Chile no es realmente gracias a su fundador; sino a su sucesión, más concretamente a su antepenúltimo hijo: Agustín Edwards Ossandón.

Agustín fue el que le dio verdadero prestigio a su apellido y linaje. Su padre había ocupado ciertos cargos públicos en Coquimbo y vagado por las minas de la misma zona, pero nunca consiguió acercarse siquiera a la riqueza que actualmente poseen. Después de morir, todas las deudas que debía recayeron sobre los hombros de su hijo, quién obviamente tuvo que lidiar con ellas.

Son dos los hechos que forman un hito, tanto en su familia y en él mismo como en los años venideros de la historia de Chile. Primero fue la fundación del actual banco Edwards y luego la compra del periódico “en circulación más antiguo de Chile y del mundo en lengua castellana”[3]: El Mercurio de Valparaíso. El primer Agustín Edwards de Chile llegó a tener 3.242 millones de dólares en dinero actual.

“Aunque de niño nunca fue demasiado estudioso -­pasó apenas por la escuela primaria-­, tenía gran capacidad con los números y una memoria privilegiada”[4]. Suceso extraño, pero ya conocido. El pequeño negocio minero que su padre había introducido, ahora él lo continuaba en su etapa de adolescente. Cinco años después decide abandonar su hogar para comenzar una vida de adulto, tratando de evitar así, problemas de convivencia con su padre.

“En dicha época comenzaba en el Norte Chico un auge de la minería, con los descubrimientos de los minerales de plata de Arqueros (1825), Chañarcillo (1832) y Tres Puntas (1848); y el desarrollo de la minería del cobre, que dieron inicio a un prolongado auge de las exportaciones y negocios mineros, donde concurrieron cientos de hombres (extranjeros y nacionales) en busca de fortuna en esta verdadera ‘California local’ cuyo centro de gravedad era la ciudad de Copiapó.”[5]

Que más tarde haya establecido el Banco Edwards del ahora es concordancia a su pasado, a como fueron sus primeros “negocios”. En Vallenar se dedicaba a proveer de alimentos y otros materiales y al préstamo de dinero a los mineros. Ellos le pagaban concediéndole metales (cobre, plata) que él vendía o exportaba. Los préstamos que efectuaba iban potenciados con un doce o dieciocho porciento de interés anual, lo que a largo plazo, aumentaba su capital.

Dos años después de haber mantenido este sistema de banquero, se mudó a Copiapó, donde se mantuvo realizando préstamos a comerciantes.

Durante su extensa estadía en Copiapó, junto a Matías Cousiño, Tomás Gallo y Gregorio Ossa y Cerda fundan la Sociedad Minera de Copiapó. Pocos años después ya era una figura social en la capital minera con una enorme riqueza bajo el brazo y un ferrocarril financiado por él mismo.

Agustín Edwards Ossandón no se detuvo ahí. En 1851 se desposa son su sobrina, la ya mencionada antes Juana Ross Edwards, un alma caritativa de buen corazón. Tomando en cuenta lo codiciosos y poco escrupulosos matrimonios de la época, su unión en santo matrimonio se deba, tal vez al deseo de no compartir su fortuna, asegurándosela a sus herederos de sangre Edwards.

En Copiapó, Agustín había creado la Casa de Edwards y Cía., y en Valparaíso instaló una sucursal de la compañía con el apoyo de su cuñado, Thomas Smith, esposo de su hermana Jacoba.

Los “bancos”, en sí no eran tales, porque en ese tiempo no había ley que lo reconociera como banquero oficial, realizando las funciones propias de un banco.

Pero ya en 1867, había instituido oficialmente el Banco de Agustín Edwards y Cía. Su negocio seguía siendo el mismo que el que lo había llevado a la cumbre; “habilitador” de mineros y exportación de metales y minerales.

Agustín Edwards Ossandón –según su testamento-, en ese entonces tenía 3 hijos vivos: Arturo, Gustavo y Agustín. Adelaida y Arturo había muerto en alguna parte de su niñez. Arturo Edwards Ross tenía 26 años cuando murió su padre.

Ya en sus últimos años de vida –con una enfermedad cardíaca que se agravaba cada día-, su última “obra” fue la compra del edificio de El Mercurio de Valparaíso.

El Mercurio de Valparaíso, un periódico de antiquísima historia chilena, fue fundado el 12 de septiembre de 1827 por Pedro Félix Vicuña, su primer director y redactor. Al principio, salían dos número por semana; hecho que cambió en 1829, año “en que comienza a aparecer todos los días”[6]. El periódico, aún en vigencia en el mundo contemporáneo, paso de dueño en dueño hasta quedar en manos de José Santos Tornero.

En medio de una crisis económica –principalmente gracias a las deudas de Tornero-, Agustín Edwards compra el edificio en marzo de 1875. En 1877 el periódico es completamente suyo.

Es posible que la crisis que afrontó El Mercurio de Valparaíso se deba también a la crisis económica que se vivió durante el gobierno de Aníbal Pinto Garmendia. En esa misma época, el 2 de enero de 1878, Agustín Edwards Ossandón fallece producto de su enfermedad al corazón.

Agustín Edwards Ossandón jamás utilizó su fortuna para construirse un palacio en Chile, no así como todos los otros acaudalados, como los Cousiño. Junto con su esposa, siempre tenían la visión y cierto enfoque en el ahorro que no desestabilizara a su familia en ningún momento. Su hijo, Arturo no se fijó en la modestia que mostraba su padre antes la “ostentación” y erigió, en 1888, un mansión para vivir. En 1892, María Luisa Mac-Clure se convirtió en dueña de la mansión. La vendió al Club de Septiembre y ahora es lo que vemos como la Academia Diplomática de Andrés Bello.

Agustín Edwards Ross “hereda el imperio económico”[7] de su padre, entre ellos, El Mercurio de Valparaíso. Se encargó de incrementar aún más la fortuna de su padre, pues había recibido la educación determinada al mundo de los negocios y el comercio.

Sentía afición por el periodismo y es posible que eso lo haya ayudado a determinar adueñarse del periódico de su padre, a pesar de la crisis que enfrentaba.

[8]De su madre heredó su espíritu solidario; el deseo de ayudar a la comunidad lo que “lo llevó a ser diputado por Quillota durante cuatro períodos; ministro de Hacienda de Balmaceda; senador por Valparaíso; presidente del Senado y ministro de Industrias, Obras Públicas y Hacienda del Presidente Jorge Montt”.

Se casó con María Luisa Mac-Clure –la ya nombrada dueña de la mansión Edwards- y tuvo diez hijos con ella; Adela, Agustín, María Teresa, María Luisa, Francisa, Juana, María, Raquel, Carlos y Raúl Edwards Mac-Clure.

La Compañía Chilena de Seguros y la Casa Agustín Edwards y Cía. le fueron legados de su padre.

Agustín Edwards muere joven, con un poco más de cuarenta años, por lo que no hay mucho que contar de su vida, aparte de los logros que acrecentaron la fortuna de su familia.

Muere en 1897 y El Mercurio de Valparaíso pasa a formar parte de sus tres hijos varones: Agustín, Carlos y Raúl.

Agustín Edwards Mac-Clure (1878) encontró su vocación en el periodismo, rasgo que recibió de su padre. A la edad de diecinueve años había escrito dos libros, inspirados en un viaje a Europa con sus padres. Al igual que su predecesor, fue político en una temprana edad; miembro de la Cámara de Diputados en 1900 y Ministro de relaciones exteriores tres años mas tarde.

Pero a lo que se dedicó realmente fue a la prensa, a escribir. Su auténtico gran logro fue, sin duda, El Mercurio –de Santiago-, fundado en el año 1900.

La versión santiaguina de El Mercurio llegó a ser más conocido que su edición en Valparaíso.
El Mercurio de Valparaíso tenía como dueño, en una tercera a parte a Agustín Edwards MacClure, por lo que la idea de inaugurar el periódico en Santiago debió haberle resultado atractivo.

El primero de junio de 1900 se instituye el Mercurio con su primera edición vespertina, pues el diario predominante en ese tiempo era El Ferrocarril, Y El Mercurio, un diario nuevo en Santiago, no era más bien un “éxito de taquilla”.

Además de El Ferrocarril, apareció un nuevo periódico llamado El Diario Ilustrado, y como su nombre lo decía, este tenía fotografías.

Agustín le había comprado a los Larraín Zañartu una enorme casa en las calles Compañía con Morandé, estructura que sería la nueva “sede que el diario necesitaba para consolidarse”[9]. Pero un edificio no era suficiente para sacar adelante el periódico.

Dos años después de su primera edición, Edwards decidió cambiar su estrategia. El Mercurio sería matutino, y se implementaría una edición vespertina también; Las Últimas Noticias de El Mercurio. La gente podía suscribirse al periódico y pagando 2 o 3 pesos más, recibir las dos ediciones.

Antiguo edificio de El Mercurio de Santiago


Actual edificio de la empresa El Mercurio, desde 1983

Todos sabemos que El Mercurio sigue vigente hasta el día de hoy, posiblemente asociados para siempre a los Edwards.

Posteriormente, Edwards siguió publicando y fundando revistas como Zig-Zag, El peneca, Selecta y Familia.

Agustín Edwards Mac-Clure se casó con Olga Budge Zañartu y solo tuvo un hijo con ella; Agustín Edwards Budge. Importante personaje político que viajó a muchas partes del mundo, incluyendo Londres, su “tierra nativa” como la llama él en su libro “My native land”, traducido a “Mi Tierra”. Fue perseguido durante la dictadura de Carlos Ibáñez Del Campo y al igual que sus predecesores, “manejó el Banco de A. Edwards, que en 1910 se había transformado en sociedad anónima, elevando su capital”[11].

Al morir en 1941, su hijo, Agustín Edwards Budge hereda El Mercurio y el Banco de Agustín Edwards. Estudió en Paris y “creó una empresa editora que llegó a ser la más grande del país, la Editorial Lord Cochrane.”[12]

Edwards Budge supo manejar todos los contratiempos que se le presentaron a El Mercurio durante la Segunda Guerra Mundial.

Contrajo matrimonio con Isabel Eastman Beéche, quién dio luz a cuatro hijos: Agustín, Sonia, Roberto y Marisol. Luego de que murió joven –antes de los 57 años-, su hijo Agustín presidió la empresa de El Mercurio.

Antes de “asumir el poder” de esta magnífica empresa, realizó varios estudios En Estados Unidos, Inglaterra; y con sus muchos honores pudo trabajar en el The Times de Londres. Fue, recién cuando llegó a Chile, nombrado dueño de El Mercurio, tras la muerte de su padre.

Para agrandar aún más la riqueza familiar, creó otros periódicos en diferentes partes de Chile. El nuevo edificio de El Mercurio en Vitacura desde 1983 fue obra suya. Y dándole prestigio a los valores inculcados en los Edwards a lo largo de sus ascendientes, instituyó la Fundación Paz Ciudadana.

Con su esposa, María Luisa del Río tiene seis hijos: Agustín, Isabel, Carolina, Cristián, Andrés y Felipe. Rompiendo el esquema de nombres, es Felipe Edwards del Río quien tal vez herede la dirección de El Mercurio, mientras que su hermano, Agustín está a la cabeza del antiguo diario vespertino Las Últimas Noticias.

Analizando la vida de los Edwards, su trabajó, sus logros, sus descendientes es cuando uno al fin entiende la importancia que se les daba a las prestigiosas familias antiguamente. Un enorme imperio –como lo vemos reflejado en el actual Banco Edwards o El Mercurio-de enormes paredes resistentes e imponente firmeza es lo que ha podido subsistir gracias al esfuerzo, visión y perseverancia de la familia Edwards. Estudiando la vida de Agustín Edwards Ossandón es cuando caemos en la cuenta de lo desacertados que pueden ser nuestros malos prejuicios acerca de la reputación de millonarios que nos inspiran ciertos apellidos en la actualidad.

No cualquiera puede establecer una verdadera “fábrica de dinero” partiendo con las grandes deudas del predecesor y con la escuela primaria apenas terminada, junto con dejar impregnados en su descendencia una serie de valores que han prevalecido por dos siglos; todos éstos rasgos y características de una gran familia que, curiosamente, atracó en algún oscuro puerto de La Serena, a bordo de un clandestino buque pirata de las costas de Inglaterra…

Por Álvaro Altamirano



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[1] Del Canto, Claudio; Torres, Rodrigo. Guía de Estudio. La Independencia de Chile. Liceso San Agustín. Depto. De CS. Sociales.
[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Familia_Edwards
[3] http://es.wikipedia.org/wiki/El_Mercurio_de_Valpara%C3%ADso
[4] http://www.edicionesespeciales.elmercurio.com/destacadas/detalle/index.asp?idnoticia=0131052005021X0330121&idcuerpo=405
[5] Nazer Ahumada, Ricardo. La Fortuna de Agustín Edwards Ossandón: 1815-1878. HISTORIA, Vol. 33, 2000. Instituto de Historia. Pontificia Universidad Católica de Chile.
[6] 1984. Historia Didáctica de Chile. Ediciones tamarugal. Santiago de Chile. Págs 712-713.
[7] http://es.wikipedia.org/wiki/Familia_Edwards
[8] Antiuo Edificio de El Mercurio de Valparaíso.
[9] http://www.edicionesespeciales.elmercurio.com/destacadas/detalle/index.asp?idnoticia=0131052005021X0330121&idcuerpo=405
[10] BERNEDO PINTO, Patricio y ARRIAGADA CARDINI, Eduardo. LOS INICIOS DE EL MERCURIO DE SANTIAGO EN EL EPISTOLARIO DE AGUSTÍN EDWARDS MAC CLURE (1899-1905). Historia (Santiago), 2002, vol.35, p.13-33. ISSN 0717-7194.
[11]
http://www.latercera.cl/medio/articulo/0,0,38035857_172985949_182644888,00.html[12] http://www.edicionesespeciales.elmercurio.com/destacadas/detalle/index.asp?idnoticia=0131052005021X0330121&idcuerpo=405

Bibliografía

-www.icarito.cl

-www.wikipedia.org

-www.memoriachilena.cl

-www.scielo.cl

-www.escritores.cl

-www.latercera.cl

-www.edicionesespeciales.elmercurio.com

-Del Canto, Claudio; Torres, Rodrigo. Guía de Estudio. La Independencia de Chile. Liceso San Agustín. Depto. De CS. Sociales.

-Nazer Ahumada, Ricardo. La Fortuna de Agustín Edwards Ossandón: 1815-1878. HISTORIA, Vol. 33, 2000. Instituto de Historia. Pontificia Universidad Católica de Chile.

-1984. Historia Didáctica de Chile. Ediciones tamarugal. Santiago de Chile. Págs 712-713.

-BERNEDO PINTO, Patricio y ARRIAGADA CARDINI, Eduardo. LOS INICIOS DE EL MERCURIO DE SANTIAGO EN EL EPISTOLARIO DE AGUSTÍN EDWARDS MAC CLURE (1899-1905). Historia (Santiago), 2002, vol.35, p.13-33. ISSN 0717-7194.

-Concha Cruz, Alejandro; Maltés Cortez, Julio. Historia de Chile. 1995. Bibliografía Internacional S.A.

Referencia de imágenes

-http://www.icarito.cl/medio/lamina/0,0,38035857__185209844,00.html

-http://www.memoriachilena.cl/archivos2/thumb750/MC0005183.jpg

-http://www.latercera.cl/showjpg/0,,1_182713993_165,00.jpg

-http://www.memoriaviva.com/Complices/Edwards_Eastman_Agustin.jpg

-http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/4/49/El_Mercurio_Vitacura.jpg/800px-El_Mercurio_Vitacura.jpg

-http://www.memoriachilena.cl/archivos2/thumb750/MC0007930.jpg

domingo, 26 de agosto de 2007

Los Cousiño


Abtract


The Cousiño came from Europe. This Surname is a derivation of “Couto De Liomil”, a reward given by the king to Alfonso de Portugal. Cousinho is the name in Portuguese, Cousiño is in Spanish.It was a rich family. Juan Antonio came to Chile in 1760, being the first of his family. He married in Chile with Maria Pastoriza de Zapata y Contreras. They had seven children.Because of the Independence War, the Cousiño lost a big part of their fortune. Matías Cousiño was the only descendant of José Antonio Cousiño.Matías had to work in the Concepcion’s mine until he married with Luz Gallo de Goyenechea, adding her fortune to his family. From this point, there were lots of achievements for the Cousiño. They got the coal, wind-mill, railway and vineyard industries.The Cousiño became one of the most important’s families, and in our daily life, they’re still part of the “biggest-pockets” families in Chile.

La familia Cousiño


Se dice que el apellido Cousiño proviene de la donación del Couto De Leomil, por el rey de Portugal don Alfonso Enrique, como premio por servicio a la familia García Rodríguez.


El “Couto de Leomil” derivó en el apelativo “el cauterio” del cual, a su vez, derivó el apellido Coutinho en Portugal y Cousiño en Galicia, España. Dos ramas de la familia con un mismo escudo de armas.

Los Coutinho ocuparon altos cargos públicos en Portugal; fueron condes de Marialava, de Barba y de Redondo y también lograron formar parte de la familia real al contraer matrimonio la quinta condesa de Marialava, Guiomar Coutinho con el infante Fernando, hijo del rey Manuel.


El primer Cousiño en llegar a Chile fue Juan Antonio Cousiño y Orge en 1760.Juan Antonio se casó el 25 de diciembre de 1765 con Maria Pastoriza de Zapata y Contreras, quien aportó al matrimonio los fundos del Marco de Ganlemu y de Curimón.De este matrimonio nacieron:

· Manuela Cousiño
· Marcela Cousiño
· Antonio Fermín Cousiño
· José Ramón Cousiño
· Pedro José Mercedes Cousiño
· Juan Antonio Cousiño
· José Agustín Cousiño

El hijo menor, José Agustín, se casó con Josefa de Jonquera y nacieron dos hijos, Ventura y Matías Cousiño; Matías no llego a destacarse en los estudios, pero si en los negocios. Así como su hermano sobresalió en el foro y la enseñanza llegando a ser uno de los más grandes pioneros del progreso económico de chile en el siglo XIX.

Debido a que la familia perdió la gran parte de su fortuna en la Guerra de la independencia, Matías debió trabajar como auxiliar en la oficina de correos de Valparaíso, donde sucedió a su padre en la jefatura en 1828. Ese mismo año contrajo matrimonio con Loreto Squella y Lopetegui, quien falleció al nacer su único hijo, Luís Cousiño Squella.


Renunció a su trabajo en correos de Chile para buscar nuevos rumbos y poder lograr una estabilidad económica para él y su único descendiente. El relativo éxito que tuvo en su aventura lo llevó a buscar empleo en la naciente minería de la plata en Copiapó.


Matías comenzó su vida de minería como mayordomo de labores en la mina de Ramón Ignacio de Goyenechea, y poco a poco fue escalando posiciones hasta llegar a administración.


En 1841 Ramón Ignacio de Goyenechea falleció dejando a cargo por completo de los negocios de la minera a Matías. Este último contrajo matrimonio con la viuda Luz Gallo de Goyenechea, quien tenía dos hijos Emeterio Goyenechea Gallo e Isidoro Goyenechea Gallo.


Su fortuna se vio incrementada en 1844 cuando en sociedad con Rafael Torreblanca utilizó una nueva maquina de su invención para beneficiar metales.

En 1850 llegó a ser director de la asociación más poderosa de Chile: la junta de minería de Copiapó.

La fortuna que logro en la minería le permitió invertir como accionista en distintos proyectos:Industria carbonífera: El 21 de mayo de 1852 Matías Cousiño compró la hacienda Colcura a José Antonio Alemparte y formó, el 9 de septiembre del mismo año, la Compañía Carbonífera de Lota en asociación con Tomás Blard Garland, y José Antonio y Juan Alemparte-. Se inició así la explotación carbonífera a gran escala. Esta sociedad compró a los indígenas los terrenos vecinos al mar en Lota, por escritura del 30 de enero de 1854.


Industria molinera: Aproximadamente en la década de 1840, expandió sus negocios en el rubro de los molinos en la región triguera de Concepción, organizando una sociedad de molineros, que exportó harina y trigo para surtir las costas del Pacífico.

Industria Ferroviaria: en 1849 fue aprobado por el Congreso Nacional el proyecto para la construcción del nuevo ferrocarril. Para materializar este proyecto fue fundada la primera sociedad anónima chilena: la Compañía del Ferrocarril de Santiago a Valparaíso. Esta sociedad se formó en base a capitales mixtos con aportes estatales y privados; entre los socios particulares se encontraban: Matías Cousiño, Candelaria Goyenechea de Gallo, Josué Waddington, Francisco Javier Ossa y Ramón Subercaseaux.



Matías construyó mansiones en Copiapó y en Santiago; una de ellas, la más conocida, es el Palacio Cousiño.

Mientras formaba la Hacienda Macul, Matías Cousiño murió en 1863, dejando solamente a su hijo Luís acompañado por su esposa, Isidora Goyenechea a cargo de seguir sus pasos. Para cumplir el sueño de su padre, Luís había viajado a Europa en 1860, inmediatamente antes de la destrucción ocurrida en el viñedo producto del ataque del insecto filoxera, para comprar variedades francesas originales como:


Cabernet Sauvignon y Merlot de Pauillac
Sauvignon de Martillac (Graves)
Chardonnay y Pinot Noir de la Borgoña.


Luís Cousiño murió inesperadamente a la edad de 38 años, y su viuda, Isidora Goyenechea, tomó el timón de las empresas de su marido, consolidando las actividades de la vinificación.

Hoy en día van en la sexta generación de la familia Cousiño, manteniendo la tradicionalidad de sus antepasados y conservándose en la aristocracia de Chile como unas de las familias más adineradas.

Arbol genealógico de los Cousiño:
http://www.palaciocousino.cl/arbolgenea.htm

Por Alejandro Meyer

martes, 7 de agosto de 2007


Introducción


Durante el término del siglo XIX y comienzos del siglo XX, se dió lugar a la obtención de inmensas fortunas que pasaron a ser parte de destacadas familias. Es así como aquellos individuos pasaron a ser grandes personajes ilustres que formaron parte de la historia de Chile, cuyos apellidos aún están en vigencia y son recordados por miles de personas. Debido a esto, este blog estará enfocado en analizar los grupos descendientes que gozaron de dichas riquezas y que siguen presentes hoy en día, siendo predominantes en el siglo XXI...